Una breve, pero emotiva ceremonia realizaron un grupo ex integrantes de la Armada de Chile que, para el Golpe de Estado de 1973 fueron perseguidos, detenidos y torturados por sus compañeros de fila, todo por oponerse al alzamiento militar y por enarbolar las banderas de la democracia, todo esto un mes antes del fatídico día.
Este grupo de uniformados que luego fueron conocidos como marinos antigolpistas se reunieron en el Parque Cultural de Valparaíso, recinto que fuese la cárcel pública de la ciudad y por la cual todos ellos pasaron como parte del periplo de detención y tortura al que fueron sometidos.
La cita efectuada el pasado sábado 7 de septiembre tuvo por objeto un especial y sentido reconocimiento a las mujeres que siempre estuvieron junto a ellos, apoyándolos y dándoles fuerza para soportar los vejámenes a los que se vieron expuestos a manos de sus pares.
Este grupo de ex marinos quiso homenajear a sus mujeres y madres que tanto los ayudaron, siendo sus cómplices afectivos y jugando un rol de contención que sólo estas fuertes compañeras supieron desempeñar.
Muchas de ellas tuvieron que llevar adelante solas las labores y mantención de sus hogares, dar educación a sus pequeños hijos y mantener vivo el espíritu familiar mientras el marido, el hijo, el hermano cumplía presidio en distintos centros de reclusión de la región y del país.
Muchos de los ex marinos presentes se emocionaron al recordar a sus mujeres – esposas, madres y hermanas- que ya no están, y que tanta lealtad demostraron en los momentos más difíciles que vivió el país con el quiebre abrupto de la institucionalidad democrática a manos de un grupo de las fuerzas armadas y de orden.
El solemne acto realizado en el hoy Parque Cultural se realizó en el edificio de Transmisión, ex galería de reos, mismo lugar en el que hace unos meses instalaran una placa recordatoria conmemorativa a los cientos de marinos y presos políticos que pasaron por el penal porteño.