Taller Roca Negra
Desde el 26 de agosto y hasta el 15 de octubre, se estará exhibiendo en la Galería de Artes Visuales de 10 a 18 horas.
La inauguración es este sábado 26 a las 12 del día.
“Me di cuenta de que no podía meter a una persona en la pintura y que era un absurdo total. Tenía que hacer otra cosa y empecé haciendo relieves con madera”, así narra el Premio Nacional de Artes 2009, Federico Assler, su arribo a la escultura.
En 1969, levanta su primera exposición con 15 figuras que son presentadas en el Museo Nacional de Bellas Artes y desde ese año nace la historia del artista con diferentes materiales, resaltando el hormigón con el que ha dado existencia a su obra, llegando a inventar herramientas para trabajarlo. Además, ha elaborado obras con madera, cartón, arena, papel y aislapol, tanto en esculturas, pinturas y dibujos.
La exposición que arriba al Parque Cultural, viene a mostrar una retrospectiva de la labor artística desarrollada por Assler en una vida dedicada a la escultura que busca revelar su proceso creativo: inspiración, proceso y creación.
La exhibición abarca más de 30 obras creadas entre 1964 y el 2017, que dan cuenta no solo de la magnitud de su obra, sino de su íntimo proceso de elaboración; exhibiendo anotaciones, bocetos, maquetas y por cierto, obras de pequeño y gran tamaño que lo han consagrado como un referente indiscutido de la escultura chilena.
La exposición ha sido definida como un homenaje en vida para este gran artista, que fue parte de la Generación del 50’ y del Grupo Rectángulo “voy a invadir el espacio, la idea es recrear mi taller y que la gente se dé cuenta cómo es el trabajo de un artista paso a paso. Será la muestra más grande que he hecho y ya no haré nada más, porque estoy aburrido” comenta el Premio Nacional de Artes, Federico Assler.
La muestra se inaugurará este sábado 26 de agosto a las 12:00 horas y se mantendrá abierta para todo público hasta el 15 de octubre.
“Muchas veces digo que soy más un constructor que un escultor”
En 1954, Federico Assler ingresó a la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica de Valparaíso, y fue parte de los talleres de dibujo de la Escuela de Bellas Artes de Viña del Mar, donde fue discípulo del artista alemán Hans Soyka.
Assler, quien en sus comienzos se dedicaba a la pintura, participó de la Bienal de París en 1963 y la de Sao Paulo en 1965. A finales de la década del 60’ da un vuelco en su desarrollo artístico y pasa a la escultura, trabajando con madera aglomerada y luego, lo que se transformaría en su elemento vital, el hormigón, siendo creador de una técnica única, que ha servido para el perfeccionamiento de diferentes generaciones de artistas.
En la década del 60’ y principios de los 70’, se desenvolvió en múltiples instituciones del mundo de la cultura, destacando sus paso por el Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile, del cual fue su director en 1968.
En 1973 viaja a España, donde residirá por una década y será el punto de partida en su propuesta de exponer escultura en espacios públicos. Al regresar a nuestro país, en 1989, pasa a transformarse en pieza clave de la Organización de Escultores, que en 1995 se convertirá en la Sociedad de Escultores de Chile, de la que será socio fundador y director.
En el 2009, recibe el Premio Nacional de Arte, que viene a entregar reconocimiento a su destacado trabajo en la escultura. Además, ha sido laureado con el Premio Altazor en tres ocasiones (2004, 2005 y 2010).