La obra hace referencia a una sociedad del futuro, donde los personajes con mascaras geométricas expresan falsas y plásticas actitudes, como una necesidad vital de comunicar. Frente a la perdida de la palabra, que a desaparecido con el pasar del tiempo, los personajes se imponen a la creación de originales formas de hacer malabarismo, llamándole a esto: Malabarismo coreográfico.
El espectáculo va dirigido a un publico familiar y homogéneo, utilizando recursos simples y a su vez espectaculares, contribuyendo a la comprensión de una narrativa perteneciente al Nuevo Circo y al Malabarismo con pelotas.