En el marco del programa Colosal se realizará este conversatorio con: Sylvia Arriagada, Nicolás Eyzaguirre, Marta Nuñez y David Luza.
Nicolás Eyzaguirre y Marta Nuñez conforman el Centro Cultural Teatro Container
Antes del gigantezco incendio de abril pasado, teatro container se preparaba para el IV Festival Teatro Container y su primer ciclo programático “Tránsito y migración”. Pretendían en él compartir una evaluación del proyecto artístico Origami, contar sobre sus presentaciones y narrar la metamorfosis del contenedor que Silvain Ohl y Satchie Noro desarrollaron durante marzo pasado en Valparaíso. Pero la realidad cambió drásticamente tras el incendio que afectó a miles de vecinos. Un gran fuego encendió la parte alta de nuestra ciudad, visibilizando un sector postergado y excluido de la postal del patrimonio de la humanidad. El fuego, elemento de vida y de muerte, de hogar y de destrucción, arrasó con barrios enteros quemándolo todo a su paso. Casas, autos, almacenes y botillerías desaparecieron, desnudando la geografía natural y al mismo tiempo las profundas fracturas sociales pre-existentes. Pensamos, entonces, que tal vez no conocíamos Valparaíso sino sus fachadas, las mismas que ya no están.
Con el cambio del panorama de la ciudad, estos dos artistas reenfocaron sus acciones y pasaron a liderar la campaña que se alojó en el Parque, denominada «Un niño, una mochila», que tuvo una excelente acogida y gran impacto en la comunidad estudiantil de los cerros afectados. Además, Eyzaguirre y Nuñez, se compenetraron a tal punto con el territotorio (y su gente) afectado, que derivaron todo su trabajo de creación y producción hacia los cerros siniestrados.
David Alejandro Luza Cornejo
Dr. Arquitecto, Decano de Facultad de Arquitectura PUCV y como tal, integrante del proyecto Amereida (http://www.amereida.cl).
La escuela de Arquitectura de la PUCV asumió como ente total su accionar en torno a la catástrofe, trasladando sus talleres y ejecutando algunos ramos hacia la zona afectada. Fue una acción de la escuela en su conjunto, que actuó como cuerpo moviendo y desplazando sus mallas curriculares para cooperar en la realización de proyectos concretos que hilvanaran el tejido social perdido. La contrucción de una cocina- comedor fue el mejor ejemplo de reconstrucción social. Luza, en este sentido, es un testigo de primera fuente para comentar, analizar y describir la resilencia urbana.
Sylvia Arriagada
Profesora de Diseño Gráfico en la PUCV que recientemente tuvo a su cargo un taller en cerro Merced, con el cual se propuso reconstruir la memoria de los cerros afectados. Con este propósito entrevistó a los vecinos para que cada cual recordara cómo era su barrio, qué había en tal o cual esquina, como era la vegetación y el paisaje urbano. Fue un trabajo de reconstrucción en conjunto que sirvió para palear el fuerte déficit de arraigo y abandono al que los estresados pobladores estaban expuestos. Quien mejor que Sylvia puede plasmar con su testimonio cómo ha sido el proceso de reconstrucción del tejido social, arrasado también por las llamas.
