Es un encuentro de dos cuerpos que buscan materializar el reciproco flujo energético. Es camino que se abre al andar y que evidencia el mundo de posibilidades que se ofrecen cuando las sucesiones se hacen naturales y, más aún, cuando es sin esperar nada a cambio. El trabajo de Wanakú responde al momento inmediato, a la certeza en la respuesta, al hombro con hombro.
Este colectivo Latinoamericano, compuesto por bailarines argentinos y chilenos residentes en Buenos aires, apuesta por la honestidad.